Cómo lavar las telas filtrantes
Una duda habitual entre los responsables de mantenimiento de filtros prensa es decidir el mejor procedimiento de lavado de las telas filtrantes. La dificultad reside en encontrar el procedimiento que prolongue la vida de la tela y devuelva la máxima capacidad de filtrado posible, evitando daños y el deterioro de las características físicas y mecánicas del tejido.
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A continuación, los tres modos más adecuados de lavado de telas filtrantes, según el caso.
Modo 1: Pistola con agua a presión
Consiste en “pistolear” las telas con agua a presión, sin desmontarlas, con una máquina hidrolimpiadora tipo Kärcher.
- Presión máxima: 100 bares
- Dispersión: en abanico
- Distancia: entre 25-30 cm
- Importante:
- Controlar la presión y la distancia para evitar el desplazamiento de hilos y la modificación de la estructura del tejido filtrante.
- La punta de la lanza no debe tocar la tela para evitar que ésta se rompa.
- Si no hay tela soporte, el proceso debe ser más cuidadoso.
Procedimiento
Se recomienda una revisión periódica de los canales de desagüe con el objetivo de comprobar que están limpios. Para proceder a esta revisión podemos soltar las telas de la parte superior y “visualmente” observar cómo están los canales. Para ello, no es necesario desmontar totalmente las telas ya que normalmente están apelmazadas y es complicado volver a montarlas. Si los canales están sucios, se limpia media placa superior y se monta la tela en los pivotes superiores. Una vez anclada la tela, se suelta de la parte inferior y se procede a la limpieza y anclaje de la misma forma.
Modo 2: Pistola con agua a presión y ácido clorhídrico
Consiste en “pistolear” como en el caso anterior y seguidamente desmontar las telas para sumergirlas en una disolución ácida.
- Tiempo de inmersión: 24-48 horas
- Disolución a un máximo del 5%.
Procedimiento
Una vez transcurrido el tiempo de inmersión, se procede a “pistolear” de nuevo la tela para eliminar cualquier resto de ácido.
Cuando se utiliza este modo de limpieza, lo más habitual es disponer de dos juegos de telas, de forma que mientras un juego se está lavando el otro está operativo.
Modo 3: Circuito cerrado con ácido clorhídrico
Consiste en un circuito cerrado, con el filtro vacío, y un tanque con una disolución de agua al 90% y ácido clorhídrico comercial al 10%. La concentración se establece entre un 20 y un 32%.
En filtros pequeños es posible realizar el lavado con la misma disolución de ácido clorhídrico.
Procedimiento
En la aplicación de circuito cerrado se hace recircular la disolución, aumentando el caudal para llenar por completo las cámaras. Por ejemplo, pasar de un caudal de 20m3/h a 35m3/h.
Completado el ciclo de limpieza, se procede a un aclarado con agua en recirculación y seguidamente se da paso al proceso de filtración.